Persiste la crisis ambiental en Acapulco a 80 días del huracán Otis
Acapulco lucha contra la persistente contaminación marina con embarcaciones varadas, sustancias nocivas y pérdida de biodiversidad.
Acapulco, conocido por sus paradisíacas playas y atardeceres deslumbrantes, enfrenta una crisis ambiental sin precedentes después de 80 días del devastador huracán Otis, que azotó la región el pasado 25 de octubre. La negligencia de las autoridades ha dejado embarcaciones hundidas y encalladas en rocas, transformando el encanto turístico del puerto en un desolador panorama.
Expertos ambientales alertan sobre la gravedad de la situación en las playas tradicionales de Acapulco, donde diversas embarcaciones yacen en el fondo del mar, sobre las piedras o en la franja de arena. La buza y ambientalista Mariana López revela que la prolongada permanencia de estas embarcaciones ha desencadenado daños severos debido a la presencia de contaminantes, como hidrocarburos, aceites y diésel, que afectan negativamente a las especies marinas, incluyendo corales cruciales para el ecosistema.
El biólogo marino Juan Manuel Bernard aporta un panorama desolador al revelar que, tras meses de estudio, se evidencian "incontrolables" afectaciones en el coral de la isla de La Roqueta, exacerbadas por la crisis climática y la contaminación acumulada. El huracán 'Otis', como categoría 5, sumió al fondo del mar al 95% de las 586 embarcaciones registradas, arrastrando consigo sustancias nocivas como aceites, metales y baterías de plomo o litio.
Los contaminantes resultantes de este desastre podrían afectar a las personas que se aventuren a nadar en las playas costeras de Guerrero, presentando problemas en la piel, cabello o incluso enfermedades intestinales. La presencia de derrames de combustibles y aceites en la zona del puerto y el club de yates es evidente, mientras que la recuperación de embarcaciones se ha visto obstaculizada por la falta de recursos económicos.
La cifra oficial de la Secretaría de Marina señala que hasta 190 embarcaciones están afectadas, algunas hundidas, otras encalladas en las piedras o flotando en la superficie. La crítica situación en Acapulco resalta la urgencia de una acción gubernamental efectiva para mitigar los daños ambientales y recuperar la esencia turística de este icónico destino mexicano.