El potencial sostenible de la energía mareomotriz

En el mundo de las energías renovables, existe un vasto recurso sin explotar que podría revolucionar nuestra forma de obtener electricidad: la energía mareomotriz. Esta fuente de energía se origina en el movimiento de las mareas y ofrece una perspectiva emocionante para la generación de electricidad sostenible y ecológica.

La energía mareomotriz se deriva del ascenso y descenso del nivel del agua en el mar, impulsada por las fuerzas gravitatorias del Sol y la Luna. A través de tecnologías como las centrales mareomotrices, las presas de marea y los sistemas de energía mareomotriz dinámica, este recurso se convierte en electricidad.

Las centrales mareomotrices, ubicadas en estuarios y bahías, emplean turbinas para generar energía cada vez que las mareas fluyen y refluyen. Las presas de marea aprovechan las diferencias de altura entre la pleamar y la bajamar para generar electricidad.

La importancia de la energía mareomotriz radica en sus numerosas ventajas. No solo es una fuente de energía limpia que no emite gases de efecto invernadero, sino que las mareas son predecibles y constantes, lo que garantiza un suministro confiable.

Además, al no requerir combustibles adicionales, se reducen los costos y el impacto ambiental. Sin embargo, a pesar de sus beneficios, enfrenta desafíos como costos de instalación elevados y requisitos geográficos específicos.

A nivel global, países como Corea del Sur, Francia, Canadá, Reino Unido y Noruega lideran la producción de energía mareomotriz y desarrollan proyectos innovadores para mejorar su eficiencia.

El futuro de la energía mareomotriz promete un mayor protagonismo en el panorama energético mundial. La Agencia Internacional de la Energía prevé que las energías renovables representen el 44% del suministro eléctrico global en 2040, y Europa está dispuesta a invertir casi 800,000 millones de euros hasta 2050 para impulsar las energías renovables marinas.