Fast fashion vs. slow fashion

Cada prenda que adquirimos tiene un impacto en el medio ambiente. Por ello, ser consciente de los modelos de producción que utilizan las diversas marcas del mercado es necesario para tomar buenas decisiones a la hora de elegir. A continuación, te mostraremos las principales diferencias del Fast Fashion y Slow Fashion, dos conceptos actuales en el mundo de la moda. 

Por un lado, el Fast Fashion o conocido también como “moda rápida”, es un modelo de producción masivo, que se da en poco tiempo y de bajo costo. Ello debido a que se adapta rápidamente a las tendencias de la moda que son cambiantes de manera constante, lo que alienta el deseo de comprar y desechar prendas todo el tiempo. 

Además de que sus procesos generan terribles consecuencias para el medioambiente por los elementos que utilizan y las emisiones tóxicas que expulsan, las personas al botar las prendas, continuamente, generan grandes toneladas de desechos.

Por otro lado, el Slow Fashion o “moda lenta”, tiene una propuesta diferente y es colaborativa en la reducción de la contaminación ambiental. Este concepto se basa en un modelo de producción eco amigable, que reduce las emisiones contaminantes y el abuso de recursos naturales. 

En esta alternativa, cada proceso de fabricación lleva un tiempo de dedicación y cuidado, lo que genera prendas de calidad y perdurables. Este movimiento busca promover la ética, la responsabilidad social y ambiental.  

Como vemos, la moda rápida contamina y provoca el consumo desenfrenado de ropa al ser de bajo costo, mientras que la moda lenta es sustentable e invita a valorar cada prenda, que aparte de ser ecológica, posee una mejor calidad que la hace más duradera. De esta manera, dependerá del consumidor elegir si quiere ser parte del cambio hacia un futuro mejor.