Más del 90% del plástico no se recicla adecuadamente
La producción de plásticos ha generado 8,300 millones de toneladas de residuos. Con solo un 9% reciclado, el impacto ambiental es alarmante.
La producción masiva de plásticos, que comenzó hace apenas seis décadas, ha generado más de 8,300 millones de toneladas de este material, la mayor parte en forma de productos desechables. Sorprendentemente, el 79% de estos residuos termina acumulándose en vertederos o contaminando el medio ambiente. Un estudio reciente publicado en Science Advances revela que solo el 9% de los plásticos desechados ha sido reciclado, mientras que el 12% ha sido incinerado, dejando una enorme cantidad de desechos plásticos intactos.
La duración del plástico en el medio ambiente es alarmante, ya que puede tardar más de 400 años en degradarse. Esto ha llevado a la acumulación de 30 millones de toneladas en los mares y otros 109 millones en los ríos, que continúan filtrándose hacia los océanos. Además, se estima que para el año 2050 los vertederos albergarán 12,000 millones de toneladas de plástico, una cifra 35,000 veces mayor al peso del Empire State Building.
El informe también destaca que los microplásticos, pequeños fragmentos de menos de cinco milímetros, están aumentando en los ecosistemas acuáticos, causando daños a aves, peces y mamíferos marinos. Estos contaminantes también representan un riesgo para la salud humana debido a su presencia en alimentos y agua.
En 2019, la producción global de plástico alcanzó 460 millones de toneladas, de las cuales 353 millones terminaron como residuos. Un 40% de estos desechos proviene de envases de corta vida útil. Paradójicamente, mientras la producción de plástico reciclado se cuadruplicó desde el año 2000, esta solo representa el 6% del total producido.
Para abordar esta crisis, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) recomienda implementar impuestos sobre los residuos plásticos, promover sistemas de depósito y devolución, y exigir a los fabricantes responsabilidad sobre el reciclaje de sus productos. Además, más de 150 países apoyan la creación de un tratado global para combatir la contaminación plástica.
Consejos para reducir los desechos plásticos
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Optar por productos reutilizables en lugar de desechables. Sustituir bolsas plásticas por bolsas de tela, usar botellas reutilizables en lugar de botellas de plástico y optar por cubiertos o popotes de acero inoxidable son maneras fáciles de reducir el consumo diario de plástico.
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Separar correctamente los residuos para facilitar el reciclaje. Clasificar los desechos en orgánicos, reciclables y no reciclables permite que los materiales plásticos sean reutilizados más eficientemente y evita que terminen en vertederos o contaminando ecosistemas.
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Evitar el uso de plásticos de un solo uso como bolsas y popotes. Opta por alternativas biodegradables o reutilizables. Por ejemplo, las bolsas compostables son una opción amigable con el medio ambiente que ayuda a minimizar el impacto de los desechos.
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Promover el uso de envases biodegradables o de materiales reciclados. Apoya a empresas que usan envases sostenibles y elige productos que utilicen materiales reciclados. Esto también incentiva la innovación hacia soluciones menos contaminantes.
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Participar en programas de educación ambiental para concienciar sobre el problema. Asiste a talleres, seminarios y campañas que promuevan la reducción de plásticos. También, comparte información con amigos y familiares para multiplicar el impacto de estas iniciativas.
La lucha contra la contaminación plástica requiere un esfuerzo global. Aunque los retos son significativos, reducir la producción y fomentar un consumo responsable pueden marcar una diferencia crucial para la salud del planeta y las futuras generaciones.