2023 fue el año más caluroso, pero 2024 podría superarlo

El aumento exponencial de la temperatura en 2023 no solo fue evidente en las cifras, sino también en imágenes impactantes de deshielo, incendios forestales y cambios climáticos extremos. La situación climática actual exige acciones inmediatas y efectivas. Las autoridades advierten que 2024 podría ser aún más extremo y cálido.

Este periodo no solo batió marcas anteriores, sino que también se acercó peligrosamente al límite crítico de 1.5°C establecido en el Acuerdo de París para frenar el calentamiento global.

El fenómeno de El Niño, que se desarrolló de manera rápida durante julio y agosto, tuvo un impacto significativo en el aumento de la temperatura global. Este evento, que ocurre periódicamente, elevó la temperatura del Océano Pacífico oriental tropical, generando consecuencias climáticas extremas en diversas partes del mundo, desde lluvias intensas hasta sequías severas.

La Organización Meteorológica Mundial advierte que este episodio de El Niño se extenderá al menos hasta abril de 2024, exacerbando aún más los efectos del cambio climático.

En el análisis de Copernicus de la Comisión Europea, se revela que 2023 superó todas las marcas anteriores, registrando una temperatura promedio mundial de 14.98 grados, siendo el primer año en tener todos los días con más de un grado adicional en comparación con el periodo preindustrial. Este incremento, de 0.17 grados respecto al 2016, el año más cálido hasta entonces, refleja la magnitud del desafío al que nos enfrentamos.

Ante este escenario crítico, la comunidad internacional se encuentra en una encrucijada, debatiendo la urgencia de abandonar los combustibles fósiles durante las recientes negociaciones climáticas de la COP28. La supervivencia de nuestro planeta depende de decisiones concretas y compromisos inquebrantables para revertir el curso del calentamiento global.