BSI: “las empresas deben priorizar la sostenibilidad”
La responsabilidad de las empresas no solo radica en su éxito actual, sino en garantizar la viabilidad para las futuras generaciones.
En un llamado urgente a la responsabilidad empresarial, BSI ha destacado la imperiosa necesidad de que las empresas y organizaciones en Latinoamérica adopten medidas para trabajar en un desarrollo sostenible que no comprometa los recursos de las generaciones futuras.
Tras un 2023 registrado como el año más caluroso en décadas, la empresa resaltó la urgencia de abordar los desafíos ambientales de manera integral. De acuerdo con Víctor Medellín, instructor del BSI Group, es fundamental implementar tecnologías sostenibles y prácticas éticas en la producción, priorizando la reducción de emisiones y la optimización de recursos naturales.
“Estamos viviendo una época de cambios acelerados. La transición hacia energías limpias es inevitable, pero para ello las legislaciones necesitan avanzar al mismo ritmo.”, menciona el instructor.
Además, las empresas deben ir más allá del cumplimiento de regulaciones, incorporando políticas de responsabilidad social empresarial. La colaboración intersectorial y la participación en iniciativas gubernamentales y no gubernamentales se postulan como elementos clave para enfrentar los retos ambientales.
Según un estudio de BSI, la sostenibilidad a menudo se percibe como una cuestión de reputación menor en algunos sectores, recibiendo poca atención ejecutiva. Medellín comenta que las barreras internas, como la falta de objetivos estratégicos en acciones sostenibles, y la predominancia de funciones como finanzas, ventas y marketing orientadas al corto plazo, obstaculizan el progreso en este ámbito.
De esta manera, la empresa señala seis aspectos fundamentales que una organización debe considerar de manera prioritaria al desarrollar su estrategia de sostenibilidad. Estos incluyen el entorno, la energía, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), los aspectos sociales y éticos, la optimización de recursos y la biodiversidad.
BSI sostiene que la adopción proactiva de prácticas sostenibles no solo cumple con las cuestiones regulatorias, también construye una imagen de marca positiva, ampliando credenciales ecológicas en licitaciones y oportunidades de negocio. La responsabilidad de las empresas no solo radica en su éxito actual, sino en garantizar la viabilidad para las futuras generaciones.