La tierra se encamina hacia un calentamiento de 2.7 °C

El planeta se encamina hacia un calentamiento de 2.7 °C para el año 2100.  La falta de consenso entre las naciones respecto a la reducción de emisiones de carbono, responsables de este aumento, ponen de manifiesto la urgencia de abordar el cambio climático.

En este contexto, la 28ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 28), que se celebra en Dubái del 30 de noviembre al 12 de diciembre, se presenta como una oportunidad clave para evaluar los avances en el cumplimiento de los compromisos establecidos en el Acuerdo de París de 2015.

Los firmantes del Acuerdo de París, conformados por 196 países, se comprometieron a limitar el aumento medio de la temperatura global a 2°C sobre los niveles preindustriales, con la preferencia de no superar los 1,5°C. La actualización de los avances en estos objetivos será uno de los temas centrales de la conferencia. Sin embargo, la interrogante persiste: ¿qué nos ofrece realmente este objetivo y cómo fue seleccionado?

Según expertos, la elección de los 2°C como límite tiene fundamentos tanto políticos como científicos. El climatólogo Daniel Swain destaca que cada grado incremental de calentamiento aumenta la probabilidad de alcanzar "puntos de inflexión" irreversibles.

Aunque el planeta ya experimenta un calentamiento de 1.2 °C desde la Revolución Industrial, algunos cuestionan si fijar el objetivo en 2°C es suficiente. Expertos como Michael Mann advierten que la diferencia entre 1.5 °C y 2°C puede ser devastadora, con la pérdida del hielo marino del Ártico, extremos climáticos más intensos y riesgos significativos para la biodiversidad.

Parece ser que los esfuerzos actuales para reducir las emisiones aún no son suficientes para cumplir con estos ambiciosos objetivos. A medida que la COP 28 avanza, la esperanza recae en acciones más contundentes y rápidas para evitar consecuencias catastróficas y lograr un futuro sostenible.