¿Cómo lograr los objetivos ESG?
Las empresas deben empezar a considerar los criterios ESG como una inversión con resultados favorables.
Así como en los últimos 10 años las empresas se han transformado en negocios digitales, en un futuro próximo las compañías deberán convertirse en sostenibles. Por ende, hoy en día, cada vez los negocios son más conscientes de que deben enfrentar los riesgos medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por su acrónimo en inglés).
Para empezar un camino a lo ecológico, las empresas deben encontrar nuevas formas de impulsar su crecimiento y desarrollo basado en este concepto; es decir, pasar del modelo de “tomar-hacer-desperdiciar” a otro que tenga en cuenta el impacto de cada producto que producimos, consumimos y desechamos. En tanto, las empresas que primero se adapten serán las líderes del mercado en los próximos años.
¿Cómo hacer esto realidad?
1. Pasar del coste a la inversión
Es verdad que la ESG representa un coste para la empresa, pero hay que dejar de verlo como un gasto y entender que es una inversión, una fuente de valor. Muchas compañías dan el paso de contratar a un director de sostenibilidad, pero hasta ahí llegan.
Sin embargo, para que la ESG sea comercialmente viable, las empresas deben empezar a considerarla como una inversión con resultados estratégicos. De este modo, tendrán la oportunidad de acceder a sectores que mueven miles de millones de dólares, como por ejemplo la energía limpia, la agricultura regenerativa y la gestión sostenible del agua.
2. Creación de valor a largo plazo
La ESG no solo es una métrica de información interanual. Las empresas en sí deben reconocer la permanencia de la ESG y sentar las bases para una creación de valor resiliente como una nueva realidad de la organización.
En otras palabras, deben ser capaces de articular claramente el impacto ESG de sus actividades. Una vez que los mercados los acepten, estarán en condiciones de aprovechar plenamente la oportunidad que ha creado la ESG.
3. Colaborar a escala en toda la cadena de valor
Para alcanzar la gran escala, es necesario que las empresas adopten un enfoque ecosistémico que involucre a toda la cadena de valor. Para ello, es indispensable contar con nuevas plataformas estratégicas que proporcionen estructuras de gobernanza y compromiso necesarias, a fin de facilitar la colaboración en todo el sistema.
En lo que es la producción de alimentos, por ejemplo, los productos deben pasar por las manos de productores, procesadores, distribuidores y minoristas, quienes deben tener sus propios retos ESG.