Empresa innovadora y ecológica transforma los residuos de la platanera
A pesar de los frutos productivos, un desafío persiste con el pseudotallo de la planta, un subproducto que carece de valor económico.
La industria del plátano en las Islas Canarias representa una parte significativa de su actividad agrícola, abarcando casi una cuarta parte del terreno cultivado, equivalente a unas 9,000 hectáreas. No obstante, a pesar de los frutos productivos, un desafío persiste con el pseudotallo de la planta, un subproducto que carece de valor económico.
La gestión de estos residuos plantea una serie de problemas tanto para la salud como para el medio ambiente en el archipiélago. Con aproximadamente 16,484.371 de estos residuos descartados anualmente, surgen complicaciones para los trabajadores agrícolas y se añaden emisiones nocivas a la atmósfera durante su descomposición.
En respuesta a esta problemática, Fibras Naturales Canarias, una empresa innovadora, ha surgido como una solución prometedora. Esta empresa tecnológica se dedica a la valorización de los residuos de plátano, transformándolos en fibras naturales utilizables en diversas industrias, desde la textil hasta la alimentaria, en consonancia con los principios de la economía circular.
Néstor Santiago Ávila, el fundador y CEO de Fibras Naturales Canarias, destaca la relevancia de este enfoque, especialmente considerando que las Islas Canarias contribuyen con la mitad de la producción de plátanos en la Unión Europea, generando una enorme cantidad de residuos cada año.
Además, la empresa se destaca como la segunda Spin Off de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, heredando el legado del proyecto de investigación Life Baqua financiado por la Unión Europea, liderado por el Grupo de Investigación de Fabricación Integrada y Avanzada.
"Extraemos fibras naturales, material celulósico y agua para diversos sectores, incluyendo textil, plástico, automotriz, construcción, agricultura y acuicultura", afirman desde la empresa.
El aprovechamiento sostenible de los recursos, como los residuos de plátano, no solo aborda problemas ambientales y de salud pública, sino que también promueve la innovación y el desarrollo económico en la región, ofreciendo una alternativa valiosa en la lucha contra el desperdicio y la contaminación.