Consumo de carbón alcanza cifras inéditas en 2023
A pesar de los compromisos climáticos, el consumo récord de carbono en 2023 desafía las expectativas con 8,530 millones de toneladas utilizadas de este combustible.
En contra de las expectativas generadas por los compromisos asumidos en la COP28 de Dubái, el consumo global de carbono ha alcanzado un hito histórico durante el presente año, superando incluso las cifras récord registradas en 2022, según el informe reciente de la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
El informe revela que se quemaron un asombroso total de 8,530 millones de toneladas de este combustible fósil, planteando desafíos significativos para los objetivos de descarbonización. Este preocupante aumento en el consumo de carbono coincide con las proyecciones del observatorio europeo Copernicus, que anticipan que 2023 se perfila para superar el 2016 como el año más cálido.
La AIE destaca que la quema de carbón, principal generadora de emisiones de dióxido de carbono (CO2), ha experimentado un incremento significativo en China, con un aumento del 4,9%, así como en India, donde se registró un aumento del 8%.
A pesar de estas cifras alarmantes, la Agencia Internacional de la Energía predice un "pico" en el consumo de carbón en 2023, anticipando una disminución a partir de 2024. Este optimismo se basa en la creciente adopción de fuentes de energía renovable, como la eólica y solar, en todo el mundo.
Sin embargo, la AIE también señala que, paradójicamente, en algunos países, como Indonesia, el auge en la extracción de níquel para la fabricación de baterías de automóviles eléctricos ha impulsado el consumo de carbón.
Por otra parte, se observa una marcada disminución en el uso de carbón en Europa y Estados Unidos, atribuida al cierre de centrales y a la disminución de la industria pesada. Alemania, por ejemplo, planea cerrar la mayoría de sus centrales de carbón en los próximos tres años, reemplazándolas con instalaciones eólicas y solares.