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Planeta en Verde
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¿Qué es el carbono azul y por qué es tan importante?

Los ecosistemas de carbono azul capturan más carbono que los bosques terrestres, desempeñando un papel crucial en la mitigación del cambio climático.

¿Qué es el carbono azul y por qué es tan importante?
¿Qué es el carbono azul y por qué es tan importante?

Los ecosistemas de carbono azul, como manglares, marismas salinas y pastos marinos, son clave en la lucha contra el cambio climático al capturar y almacenar grandes cantidades de dióxido de carbono (CO₂). Aunque ocupan menos del 0.5% de la superficie marina mundial, tienen la capacidad de absorber carbono entre dos y cuatro veces más rápido que los bosques tropicales y almacenan hasta cinco veces más carbono por hectárea.

Estos ecosistemas no solo funcionan como sumideros de carbono, sino que también estabilizan las costas, reducen la erosión y protegen comunidades de tormentas e inundaciones. Sin embargo, en las últimas décadas, han experimentado una grave degradación: más del 50% de las marismas salinas y los manglares han desaparecido, principalmente debido a la urbanización, la agricultura y el cambio climático.

La pérdida de estos ecosistemas no solo implica la desaparición de su capacidad de absorción de carbono, sino que también libera el CO₂ acumulado durante siglos o incluso milenios, contribuyendo al calentamiento global. Se estima que su degradación emite cerca del 19% del carbono liberado por la deforestación a nivel mundial.

Diversos organismos internacionales han destacado la urgencia de restaurar y proteger estos ecosistemas. La conservación del carbono azul es una estrategia rentable para reducir las emisiones globales y mantener la biodiversidad marina. Además, varios países han comenzado a incluir estos ecosistemas en sus compromisos climáticos, reconociendo su papel en la mitigación del cambio climático.

Proteger y restaurar manglares, marismas y pastos marinos es una tarea urgente. Su papel en la captura de carbono, la protección costera y el mantenimiento de la biodiversidad los convierte en uno de los aliados más valiosos en la lucha contra el cambio climático. La comunidad internacional debe intensificar sus esfuerzos para evitar su desaparición y asegurar un futuro más sostenible.